Cuidado de tus joyas
1. Cuidado de tus Piedras Naturales
Para que tus accesorios tengan la mayor duración y tus piedras no se dañen, te recomendamos NO mojar tus joyas, ya que las piedras naturales al estar compuestas por minerales poseen distintas durezas y pueden verse dañadas en su aspecto, composición o textura.
Por esto, no debes bañarte con tus joyas puestas, ni tampoco aplicarles directamente productos químicos, como lo son el jabón, shampoo, perfumes, alcohol gel, alcohol spray líquido, etc.
Es importante considerar que NO todas las piedras naturales se pueden mojar ni limpiar con agua, cada piedra es única y tiene sus propias características y cuidado.
También debes evitar cualquier tipo de golpe, caída o descuido, que pueda fracturar o quebrar las piedras de tus joyas. No es recomendable dormir con tus accesorios puestos, ya que pueden engancharse o sufrir algún daño por movimientos involuntarios durante el sueño.
2. Cuidado de tus Joyas de Acero Quirúrgico
Debido a que el acero quirúrgico presenta una gran resistencia a la corrosión, oxidación y desgaste, su cuidado es un proceso muy sencillo:
a) Guarda tus joyas alejadas de objetos afilados y por separado o envuélvelas en una tela suave para evitar que se rayen, enreden o enganchen entre sí.
b) Para limpiar tus joyas de acero quirúrgico puedes utilizar un paño suave o de microfibra, para eliminar el polvo y la suciedad que hayan adquirido y así recuperar el brillo. Este tipo de metal no requiere cuidados adicionales.
3. Cuidado de tus Joyas de Plata 925
Para que tus joyas se mantengan siempre brillantes, te recomendamos almacenarlas en un lugar fresco y seco, preferiblemente hermético. Guarda cada pieza individualmente o envuélvelas en una tela suave para evitar que se rayen, enreden o enganchen entre sí.
No expongas tus piezas a agentes corrosivos como el agua, perfumes, detergentes, jabones, cremas, sudor, cloro, etc. o cualquier producto que contenga azufre para evitar la aparición de oxidación.
Es natural que la plata, al estar en contacto con el oxígeno, se oxide y se vuelva negra. Este proceso natural es completamente reversible. Para esto, puedes limpiarlas con un paño suave o de microfibra, el cual siempre incluimos de regalo con tu compra de joyas de plata 925. Evita limpiar tus joyas con toallas de papel o cualquier paño que contenga fibras, ya que se pueden rayar.
La luz directa del sol también puede producir que la plata se empañe, por lo que te recomendamos no tomar sol con tus joyas puestas ni exponerlas directamente a los rayos UV por tiempo prolongado.